jueves, 9 de agosto de 2012

Primeras imágenes de Curiosity. ¿El ser humano pisará algún día Marte?.

    
El exitoso descenso del vehículo explorador de Marte "Mars Science Laboratoty (MSL) Curiosity", no sólo ha cautivado los medios de comunicación mundiales en los últimos días, sino que ha sido un poderoso impulso a las diversas iniciativas que postulan el envío de una misión tripulada a la superficie del planeta rojo. Entre otros, el joven y exitoso empresario "Elon Musk", se ha visto profundamente motivado, por los recientes éxitos deseando llevar humanos al planeta Marte en los próximos 12 a 15 años.El proyecto Mars-500 ya ha llevado a cabo un experimento simulando dicho periodo de tiempo en condiciones que pudieran parecerse a las que sufriría la tripulación a bordo de un viaje a Marte. 
(Logotipo: misión Mars-500)
A día de hoy, el hecho de permanecer ese número de días quizás no sea lo más complejo, sino el indudable problema que supone la baja gravedad en la salud humana. Valeri Poliakov, quien permaneció de manera ininterrumpida en el espacio durante 437 días a bordo de la antigua estación espacial MIR entre el 8 de enero de 1994 y el 22 de marzo de 1995, fue sin lugar a dudas la mayor de las hazañas espaciales llevadas a cabo por un ser humano. De cara a viajar a Marte, hablamos de que el vuelo Tierra-Marte tendría una duración de 250 días, la permanencia en la superficie de Marte serían 30 días y el retorno Marte-Tierra tendría una duración de 240 días. De aquí al día en el que la misión de viajar por primera vez a Marte con tripulación humana se lleve a cabo, grandes retos tendrán que haberse salvado. Se deberá mejorar el medio de desplazamiento para acortar los tiempos de viaje y también, algo aún más importante bajo mi punto de vista, desarrollar condiciones de gravidez que permita a la tripulación viajar en condiciones óptimas de salud. La ingravidez lleva a cabo muchos problemas en nuestro cuerpo. Osteoporosis, atrofia muscular con fuertes incidencias en el sistema cardiovascular, disminución del número de glóbulos rojos en sangre, etc. No obstante, lo que está claro es que la ciencia avanza a pasos de gigantes y la realidad a veces supera con creces la ficción. En unos años probablemente veamos la primera misión tripulada a Marte. Sólo espero poder vivir el tiempo suficiente para ver los acontecimientos que en los próximos años nos esperan, aunque sin lugar a dudas, todo el tiempo que viva me parecerá poco... Algún día puede que nuestros descendientes tengan familia en otros planetas, o que simplemente se vayan a pasar unos días de viaje de ocio a otro planeta. El tiempo nos mostrará si el ser humano es capaz de superarse a sí mismo en esta gran carrera espacial llena de descubrimientos. 


(Imagen de Valeri Poliakov en su llegada a la Tierra)
Por cierto, Valeri Poliakov ha comentado recientemente en una noticia, tras ver la llegada de Curiosity a la superficie marciana, que está dispuesto a viajar a Marte pero eso sí, en compañía del veterano John Gleen, el primer astronauta norteamericano que viajó al espacio. "Le pregunté a John si estaría dispuesto a viajar a Marte y me respondió que, si es conmigo, lo haría ahora mismo", comentó Poliakov a la prensa durante un simposio sobre fisiología y gravitación celebrado en Moscú. "Yo y Gleen estamos listos para una expedición a marte, incluso nuestras esposas ya nos dieron su permiso", añadió el cosmonauta al comentar las posibilidades de una misión tripulada al planeta rojo. Según Poliakov, la primera expedición tripulada a Marte deberá estar integrada por los astronautas profesionales de mayor experiencia: "deberán ser al menos cuatro hombres en una edad cercana a los sesenta años", indicó. Explicó que el viaje a Marte supone una serie de factores adversos par ala salud de los astronautas como el efecto prolongado a la ingravidez, la radiación cósmica y otros aspectos de orden psicológico. "Al influir estos factores de manera determinante en la salud y en la esperanza de vida de los cosmonautas, en la expedición a Marte deben participar personas maduras", subrayó Poliakov, especialista en medicina espacial. Otro factor importante es la compatibilidad psíquica de los miembros de la expedición y esto implica optimizar al máximo las pruebas psicológicas. Sin lugar a dudas, estos hombres están hechos de otra pasta, me parece algo sencillamente increíble. A continuación os dejo con una sucesión de imágenes del interior del cráter "Gale", las dos depresiones que podemos observar en la primera fotografía y alguna de las sucesivas pudiera corresponder a la onda expansiva de los propulsores de Curiosity en la fase de descenso, (según la NASA). 




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